martes, 7 de julio de 2009

Caminos...


Aún con todos los esfuerzos del mundo, la vida parece aferrarse a destinar nuestro camino, llevados por la esperanza, preservando nuestra integridad y llorando la ambigüedad de los dias, desiertos humedesidos de añoranza, bosques petrificados de paz, es abrumadora la manera en que las ganas se auyentan, con cada paso del reloj que consume recuerdos y esperanza, trato de encontrar sin buscar, o talvez busco sin encontrar, o talvez ni siquiera quiero encontrar, fuiosamente me recuesto en vano, tratando de soñar, pues, aún la realidad me golpea despierto, tratando de recordar y buscar mi razón de estar aqui, veo a mi alrededor impotente de no poder ayudar, impotente de no puder menguar, impotente de verlos reir, de verlos humillar, de verlos castigar.


Canciones incrédulas, que dicen lo que no sentí ni sentiré, canciones espeluznantes que rigen mi pesar, canciones cuya melodía no podré olvidar, sonidos que atraviezan mi cerebro, apuntan a mi corazón y flechan de olvido, melodias que no me permiten olvidar, que me transportan a mi mediocridad, melodias que me destierran a lo profundo de mi ser, me condenan y me taladran el corazón, como ladridos de perro, como peleas de gallos, violentamente viene el temor hacia mi, como llanto de bebe, inquisitivamente apuñala mis oidos, estado de vegetación que no tolero mas, esta pesadumbre me desorienta de lo que quiero y de lo que soy. Música, música, música! ayudame a olvidar, distráeme de mis propios pensamientos.


Alguien para amar, alguien para despresiar, alguien a quien acariciar, alguien que me destroce, alguien que me aniquile de una vez por todas, alquien que me joda, alguien para amar, como siempre, sin que me pueda amar.